Para disminuir el gasto en transporte por parte de las familias chilenas, se propone rebajar las tarifas de adultos actuales del transporte público en 50%, tanto en Santiago como en regiones.
Por ejemplo, en Santiago la tarifa de adulto por viaje es en promedio cercana a $720. Con la propuesta bajaría a $360.
En total, tanto para la RM como para las regiones, el costo total de la propuesta estaría en torno a los US$ 620 millones anuales. De este total, US$ 320 millones se destinarían al Sistema Metropolitano de Transporte Público y US$ 300 millones, al Transporte Público Regional.
Para financiar la propuesta, se propone aumentar el componente base del impuesto específico del diésel de 1,5 a 3 UTM/m3 y eliminar el reintegro de este a las empresas, lo que aumentaría la recaudación fiscal en US$ 688 millones anuales.
Desde el punto de visto económico y social, la propuesta permite internalizar las externalidades negativas vinculadas a la contaminación que producen los motores diésel, junto con subsidiar una fuente limpia de transporte, como el metro y los buses eléctricos.
La siguiente tabla detalla los costos e ingresos de la propuesta, simulando cuatro escenarios de aumento del impuesto específico al diésel.